Precisamente, en la tarde de ayer arrancó el curso de Electrocardiografía básica y síndrome coronario agudo, que imparte el enfermero instructor Eduardo Hinojosa. Según explica este docente de la Escuela Internacional de Ciencias de la Salud, el objetivo de esta formación es que los profesionales inscritos, “adquieran las habilidades necesarias para el registro e interpretación de la electrocardiografía básica”.

Además, el también Experto en Urgencias y Emergencias subraya que la importancia de este curso reside en que “es el profesional de enfermería el que hace el registro electrocardiográfico, y dentro de nuestras competencias está detectar las arritmias para saber a quién comunicárselo y la premura con la que hay que comunicárselo”. Es decir, la labor de la enfermera o enfermero no se limita a la obtención de un electrocardiograma de calidad, debe decidir e interpretar si el trazado es normal o si, por el contrario, sugiere algún tipo de alteración. La información que aporta el electrocardiograma es un fiel reflejo de las anomalías de conducción cardiaca. De la actuación adecuada y del tiempo en que es efectiva, puede depender la vida del enfermo. Un diagnóstico y tratamiento rápidos y correctos pueden reducir la mortalidad y mejorar el pronóstico de estos pacientes.

De ahí que, durante esta actividad formativa, las enfermeras y enfermeras inscritos vayan a realizar prácticas de interpretación de electrocardiogramas, utilizando registros electrocardiográficos reales, “siempre preservando el anonimato de los pacientes a quienes se les hizo esta prueba”, aclara Hinojosa.

Previo a la celebración de este curso, ha tenido lugar recientemente en la sede colegial el curso sobre Urgencias y emergencias en la edad pediátrica, de cuya impartición se ha encargado Alejandro Blanco Aoiz, Máster en Urgencias y Emergencias y Doctor en Enfermería. Las enfermeras y enfermeros que han seguido esta formación han tenido la oportunidad de actualizar conocimientos, repasar las guías de emergencias pediátricas del Consejo Europeo de Resucitación (ERC) y practicar todas las técnicas asociadas al Soporte Vital Básico y Avanzado Pediátrico, entre otros contenidos.