El módulo de Formación Profesional por el que apuesta el Ejecutivo incorpora como “intervenciones sanitarias asistenciales” propias del título los “cuidados básicos de enfermería”, algo incomprensible ya que si lo que persigue esta titulación es contar con personal cualificado lo que se debe hacer es recurrir a las enfermeras, tanto generalistas como especialistas en Geriatría, con las que ya cuenta la sociedad, profesionales formados durante años para atender y hacer de nuestras residencias lugares seguros y sanos. En los equipos asistenciales de las residencias de mayores y el sector sociosanitario las enfermeras trabajan en equipos de cuidados junto a los técnicos en cuidados auxiliares de enfermería (TCAE). No es necesario que se incorporen nuevas titulaciones, sino que se refuercen las plantillas del ámbito sociosanitario y se cuente con los profesionales ya existentes.

En este sentido, el Colegio cordobés incide en la necesidad de apostar por las enfermeras como referentes en cuidados y no que nuevos perfiles profesionales se sumen a un sector laboral donde prevalece la precariedad laboral, la ausencia de enfermeras -generalistas y especialistas en Geriatría- y la falta de control. De hecho, es preciso invertir para que se traduzca en una mejora de prestaciones y condiciones de trabajo, como ya también el Colegio ha puesto de manifiesto en el Decálogo justo e inaplazable de la Enfermería cordobesa.

En este sentido, se recuerda que tanto el Consejo Andaluz de Enfermería (CAE) como el Consejo General mostraron previamente su rechazo a la proposición no de ley del PSOE que el pasado mes de marzo planteaba este nuevo módulo formativo. De igual manera, distintas sociedades científicas de Enfermería han trasladado su rotunda oposición a esta titulación.

Hay profesionales de Enfermería que podrían realizar una excelente labor en las residencias y centros sociosanitarios de toda índole. Sin embargo, se trata de un sector que se ha caracterizado, como norma general, por ofrecer a los profesionales unas condiciones laborales indignas para que las enfermeras subsistan y crezcan profesionalmente. A pesar de ello, muchas enfermeras son llamadas por su vocación a trabajar con este tipo de pacientes. La falta de profesionales sanitarios cualificados en las residencias, como ha dejado patente la pandemia que atravesamos, no se va a solucionar con una titulación mal enfocada, dirigida a contratar profesionales low cost que sustituyan a los sanitarios.