Se trata de un curso que se imparte en colaboración con la Escuela Internacional de Ciencias de la Salud y que ha sido financiado al completo por el Colegio de Enfermería. Cuenta con un marcado carácter práctico con el objetivo de “avanzar en un campo prioritario en la enfermería, ya que los enfermeros siempre se van a encontrar con suturas allá donde vayan”. Son las palabras del enfermero José Fernando Cejas Delgado, el profesor encargado de guiar a los estudiantes del curso para que, al finalizar, sean capaces de aliviar al paciente con la mejor técnica posible.

 

Para aplicar toda esta teoría, el alumnado ha estado trabajando sobre panceta de cerdo, al ser la piel más parecida a la del ser humano. De este modo, los enfermeros participantes han aprendido las “distintas posibilidades ante una incisión, eligiendo el material adecuado si vamos a cerrar una cavidad, si vamos a cerrar en piel o si hay pérdida o no de sustancia, además de elegir la mejor técnica según la localización de la herida”, afirmaba Cejas.

 

El Colegio de Enfermería continua así con su apuesta por la formación con uno de los cursos más valorados y demandados por los colegiados. “No sólo tenemos alumnos en situación de desempleo, también vienen muchos que ya cuentan con su plaza en propiedad y que quieren mejorar, profundizar y ampliar sus conocimientos en este campo”, aclaraba el profesor. Toda una semana de contenido que repercutirá, finalmente, en el bienestar del paciente.