– ¿Cuáles han sido las principales problemáticas a las que se han tenido que enfrentar los profesionales de la Enfermería en Córdoba durante el año que acaba de concluir?
– Lamentablemente, en este punto tenemos que recordar el triste fallecimiento a consecuencia del coronavirus de varios profesionales en Andalucía. Además de estos fallecimientos, también han sido muchos los profesionales de Enfermería contagiados. A nivel profesional, entre los principales problemas ha estado la evidente falta de medios con la que los enfermeros tuvieron que afrontar el inicio de esta pandemia, la escasez de medios de protección y el uso, en muchos casos, de materiales de seguridad defectuosos, junto con el propio riesgo personal al que todavía se enfrentan. A todo ello se suma además, sobre todo en los primeros meses, el miedo de los enfermeros no solo por su salud propia, sino por el temor de contagiar a sus familiares. Por ello, desde el Colegio Oficial de Enfermería de Córdoba no hemos cejado de denunciar y reivindicar a todas las instancias provinciales, autonómicas y nacionales la necesidad de dotar de más recursos humanos y materiales a nuestros profesionales. Asimismo, y para el caso de los futuros enfermeros, también nos preocupa cómo está afectando la pandemia a la formación, sobre todo práctica, de los estudiantes de Enfermería cordobeses.
Entre los principales problemas ha estado la evidente falta de medios con la que los enfermeros tuvieron que afrontar el inicio de la pandemia»
– ¿Cómo definiría la situación actual en la que se encuentran los enfermeros de Atención Primaria, Hospitalaria, y los que trabajan en residencias de mayores?
– En todos estos ámbitos la situación continúa siendo grave, porque la sobrecarga asistencial no disminuye, los medios no aumentan, la presión y tensión se va acumulando y la propia evolución de la pandemia no invita a ser optimistas. Por poner un ejemplo, en un reciente estudio realizado desde el Consejo General de Enfermería sobre la situación en las Unidades de Cuidados Intensivos se señala que Andalucía necesitaría incorporar unas 1.200 enfermeras más tan solo en las UCIs ante un escenario duro del Covid-19. Los enfermeros cordobeses que trabajan en Primaria, hospitales y residencias siguen sin desempeñar su labor asistencial en las condiciones óptimas. En este sentido, el Covid-19 ha evidenciado la falta de planificación de la Administración sanitaria desde hace ya demasiados años, y ha sacado a la luz las carencias que viene arrastrando el sistema público sanitario cordobés y andaluz.
– Ya a nivel más institucional, ¿qué balance hace de la labor desarrollada desde el Colegio Oficial de Enfermería de Córdoba durante 2020?
– En el marco de nuestras funciones y competencias hemos continuado representando y siendo la voz de los más de 4.500 profesionales enfermeros existentes en Córdoba, así como atendiendo sus necesidades, peticiones y reclamaciones. Por otro lado, la pandemia nos ha impedido desarrollar los habituales cursos y talleres de formación en nuestra sede, lo que nos ha obligado a ofertar esta formación de manera virtual. Y tampoco hemos podido celebrar el habitual homenaje a los colegiados jubilados, que realizaremos en cuanto sea posible. Ya de cara a la sociedad, hemos desarrollado campañas animando a vacunarse contra la gripe u ofreciendo consejos y recomendaciones frente al Covid-19, entre otras iniciativas.
– ¿Qué resaltaría, en positivo y negativo, de las relaciones con otras instituciones y administraciones?
– En todo momento hemos dado siempre muestras de colaboración institucional y hemos mantenido el mayor contacto posible con las instituciones, sanitarias o no, y con los responsables de los principales grupos políticos. Por poner un ejemplo, el pasado mes de julio el alcalde de Córdoba, José María Bellido, realizó una visita institucional a la sede del Colegio, junto a la diputada del Parlamento andaluz Beatriz Jurado. Con todo, y en el ámbito sanitario, durante todo el año hemos venido denunciando la falta de interlocución, diálogo y comunicación con la Administración sanitaria andaluza y sus máximos responsables, que parece que seguían sin contemplar a la Organización Colegial como los máximos representantes legales e interlocutores válidos de la profesión enfermera en su conjunto. Reiteradamente solicitamos información al Servicio Andaluz de Salud (SAS) y la Consejería, que no nos informa sobre resoluciones de la mesa sectorial, protocolos, ofertas de empleo público, concursos de traslados, planes de contingencia… Una falta de coordinación y cooperación que no es consecuencia de la pandemia, sino que viene siendo constante en los últimos años. Esta situación nos llevó, a nivel ya del Consejo Andaluz de Enfermería (CAE) a mantener conversaciones con todos los grupos políticos presentes en el Parlamento andaluz, y en diciembre conseguimos retomar las relaciones a través de una reunión entre el Pleno de Presidentes del CAE y la Viceconsejera de Salud y Familias, Catalina García, en la que se acordó continuar manteniendo reuniones periódicamente, así como delegar los asuntos provinciales en unas mesas técnicas en las que participarán los delegados y presidentes de Colegios provinciales. Con todo, y en la actual coyuntura del Covid-19, hemos tenido que solicitar en múltiples ocasiones, tanto a la Consejería de Salud y Familias de Andalucía como al Ministerio de Sanidad, que tengan en cuenta nuestra opinión a la hora de analizar posibles medidas que afectan tanto al colectivo enfermero como a la ciudadanía en general. Y de igual manera demandamos tener acceso a todo tipo de datos relacionados con la incidencia del covid-19 entre los profesionales de Enfermería.
– En la labor institucional, desde el Colegio cordobés se continúa reivindicando mejores condiciones de trabajo y más medios y personal para la Enfermería. ¿Cuál sería actualmente la principal reivindicación en este sentido en el marco del sistema público sanitario andaluz? ¿Y en el ámbito del sector privado?
– Además de un sistema que garantice mejores condiciones profesionales y laborales y luche contra la precariedad, en este punto un importante tema es la necesidad de adecuar las ratios enfermera-paciente, donde Andalucía y Córdoba continúan a la cola de España. En Córdoba hay tan solo 494 enfermeras por cada 100.000 habitantes, poco más de la mitad de la media europea de los países de nuestro entorno, y un 46% menor que la ratio ideal de 917 enfermeras por 100.000 habitantes que considera la Organización Mundial de la Salud (OMS). Todo ello en el marco de una Andalucía que es la segunda Comunidad Autónoma del país con la ratio más baja. La Administración debe entender que la calidad en la atención que se debe prestar a los ciudadanos está reñida con la cantidad de pacientes a atender por cada profesional. Ya a nivel privado, otro de los problemas que ha evidenciado el Covid es la infradotación de personal en muchas residencias de mayores, junto a también unas condiciones laborales manifiestamente mejorables.
La administración debe entender que la calidad en la atención que se debe prestar a los ciudadanos está reñida con la cantidad de pacientes a atender por cada profesional»
– Respecto a la fuga de profesionales que viene denunciando el Colegio durante los últimos años, ¿qué medidas considera que serían necesarias poner en marcha?
– Solicitamos un sistema de contrataciones adecuadas, estables y mejor retribuidas, contrataciones dignas tanto en duración como en retribuciones que acaben con los contratos precarios. Hay que estabilizar las plantillas para acabar con el alto porcentaje de interinidad. Y que la bolsa de empleo de contratación del SAS, abierta recientemente tras permanecer cerrada desde 2018, esté accesible de manera permanentemente, permitiendo así a los enfermeros actualizar sus méritos y la incorporación a esta bolsa de los nuevos graduados en Enfermería. Porque no es cierto que en Córdoba y en Andalucía no haya profesionales de Enfermería para contratar. La inestabilidad e incertidumbre vienen provocando esta fuga masiva de profesionales cordobeses en busca ya no solo de unas condiciones de duración de contratos y retributivas dignas, homologables a la media española, sino de una estabilidad profesional. Además, y volviendo a la citada falta de interlocución y diálogo, desde el SAS nos podrían comunicar ofertas de empleo directo, fuera de bolsa, como hacen a los sindicatos, con el objetivo de dar la mayor difusión posible, ya que la Organización Colegial tiene una cobertura universal, mientras que los sindicatos solo llegan a sus afiliados. En el ámbito del sector privado, además también de una mejora de condiciones, pedimos también que se recupere como criterio baremable en las oposiciones y ofertas de empleo público andaluz para Enfermería la experiencia profesional en hospitales privados/concertados. Además, también es necesario que los profesionales cuenten con más medios tanto en el ámbito público como en el privado.
– Y entre otras reivindicaciones profesionales, la implantación de la enfermera escolar. ¿Cómo valora la puesta en marcha este curso de las enfermeras referentes escolares por parte de la Junta, de momento solo circunscritas a las labores de gestión de casos del Covid-19?
– Estas enfermeras referentes son un primer paso que valoramos positivamente, aunque desde el Colegio de Córdoba seguimos instando a la Consejería de Salud y Familias a la necesaria implantación de la figura de la enfermera escolar, una profesional que debe integrarse en la comunidad educativa y que sería la encargada de asumir la atención a niños con patologías crónicas, las actividades de educación y promoción de la salud, la asistencia a eventualidades como accidentes o lesiones de los estudiantes, y que en estos tiempos de pandemia darían además una respuesta más rápida ante los posibles casos de Covid positivos, coordinándose directamente con Atención Primaria, Salud Pública y Servicios Sociales, y colaborando con los centros educativos en la implementación de protocolos para evitar contagios. Una Enfermería Escolar que asumiría el liderazgo en la prevención y atención sanitaria de la población escolar, profesorado y familias incluidos. Por otro lado, desde el CAE se lanzó en octubre el ‘Manifiesto por la Enfermería Escolar’, al que se han adherido las principales asociaciones y colectivos que conforman la comunidad educativa andaluza. La instauración de la Enfermería Escolar debe ser una prioridad de salud pública.
La instauración de la Enfermería Escolar debe ser una prioridad de salud pública»
– Por otro lado, ¿cuáles están siendo las principales inquietudes que trasladan los colegiados a la institución?
– Además de múltiples dudas en torno al Covid-19, desde el primer momento de la pandemia los colegiados han venido solicitando a su Colegio información y denunciando situaciones como la falta de materiales de protección. Asimismo, entre las principales inquietudes que trasladan, la citada necesidad de estabilidad en el empleo y acabar con la precariedad laboral, conocer cuándo se va a materializar la toma de posesión de algunas plazas de concurso del SAS y demandar que se termine con la no baremación de la experiencia profesional en hospitales privados y concertados en las oposiciones y ofertas de empleo públicos.
– Ya de cara a este año 2021, y teniendo en cuenta las limitaciones que sigue provocando la pandemia, ¿qué principales proyectos e iniciativas tiene el Colegio de Córdoba sobre la mesa?
– Durante 2021 seguiremos impulsando la profesión en todos los sentidos, dando voz a los enfermeros y visibilizando, entre otros temas, la necesidad de mejores condiciones profesionales y la cada vez mayor labor investigadora de los profesionales cordobeses. Continuaremos trabajando por garantizar la protección máxima de los enfermeros y enfermeras frente al Covid-19. A nivel general, seguiremos impulsando el movimiento Nursing Now, que demanda que la profesión enfermera asuma el lugar que le corresponde en los puestos de decisión política y social, y continuaremos pendientes de los grandes temas que afectan a la profesión, como la futura ley sobre las ratios enfermera-paciente. Asimismo, seguiremos avanzando en el proyecto de la Delegación cordobesa de la ONG Solidaridad Enfermera, y colaboraremos siempre con el resto de administraciones que nos lo soliciten, como por ejemplo el Ayuntamiento de Córdoba. Todo ello sin olvidar la convocatoria de nuestro Premio Científico Enfermería Cordobesa, a nuestros colegiados jubilados, y la formación, donde continuaremos ofertando cursos y talleres de calidad bajo modalidad on-line, mientras la situación del coronavirus no nos permita volver a la formación presencial en la sede del Colegio. Asimismo, y tanto para los profesionales como para la ciudadanía, seguiremos demandando mejoras en algunas infraestructuras sanitarias y la puesta en marcha del prometido tercer punto de urgencias extrahospitalarias en Córdoba capital; y que la Junta de Andalucía aumente el número de plazas ofertadas y especialidades de formación de Enfermero Interno Residente (EIR) y defina plazas concretas de enfermeros especialistas en el sistema público, entre otros temas. Y también queremos abrir el Colegio a la sociedad, para lo cual tenemos en proyecto diversas iniciativas, como una serie de charlas en los institutos para concienciar a los jóvenes frente al Covid-19.
