Estas matronas aseguran que el proyecto de este centro y la humanización del parto en este hospital demostró poner a la FHSJDM «a la cabeza en la atención al parto normal en España. Nuestro compromiso con el proyecto y el esfuerzo por proporcionar cuidados de la calidad ha quedado demostrado tanto por los excelentes resultados clínicos obtenidos en los últimos cuatro años, como por las numerosas muestras de reconocimiento y agradecimiento que recibimos de las mujeres y de organismos externos».

Resultados clínicos

Entre los citados resultados, estas matronas destacan el hecho del aumento del porcentaje de partos vaginales (de un 64% a un 81%, siendo más de la mitad de los partos,tanto en el Centro de Nacimientos como en la Sala de partos, de forma natural, sin uso de analgesia epidural), la reducción del porcentaje de cesáreas (de un 24% a un 12%) y la reducción del porcentaje de partos instrumentales (de un 12% a un 7%).

Sin embargo, se enfrentaban diariamente a diversas situaciones laborales que no facilitaban la atención hacia las mujeres y sus familias, aseguran.

«Tras meses de intentos fallidos de comunicar nuestras problemáticas a la dirección y a raíz de la dimisión ya en ese momento de algunas matronas en nuestro equipo, redactamos una carta pidiendo una reunión de carácter urgente en octubre con la dirección del centro para solicitar una intervención inmediata. La reunión se nos concedió 2 semanas después. En ella expusimos: la gran resistencia al cambio (…); la no existencia de mecanismos de resolución de conflictos, donde a diario existían conflictos directos entre miembros de los distintos equipos a nivel profesional cuestionando las capacidades del equipo de matronas, en muchas ocasiones a nivel personal con faltas de respeto y vejaciones delante de las pacientes (,,,); y la falta de personal que no permite la cobertura de las guardias».

«La falta de personal, los retrasos en la búsqueda y contratación de matronas, los turnos extra que realizamos desde hace meses y el aumento de la carga de trabajo nos llevó a una situación extrema. En diferentes ocasiones, habiendo menos matronas por turno, se pidió colaboración por parte de otros estamentos, obteniendo una respuesta negativa provocando algunas situaciones en las que la atención hacia las mujeres a nuestro parecer fue insegura. En la reunión solicitamos que se hiciera un comunicado oficial a las familias para que fueran informadas de que ya entonces de que no se podía asegurar la atención en el CN además de verbalizar que no estábamos dispuestas a arriesgar la vida de las pacientes solicitando si fuera necesario el cierre temporal del servicio hasta poder asegurar la seguridad. En esta misma propuesta recalcábamos que el cierre temporal del centro garantizaría una asistencia segura en la Sala de Partos mientras que se pudiera solucionar la falta de matronas, ayudando también a disminuir la sobrecarga de trabajo. Estas peticiones nunca se llevaron a cabo».

Dos meses después de dicha reunión, y ante la inexistencia de un plan de acción por parte de la dirección del hospital «empeoró la situación, teniendo como consecuencia la dimisión de aún más matronas»; aunque estas profesionales muestran su esperanza de que se pueda llegar a una solución futura «y que las mujeres sigan teniendo Centros de Nacimientos como opción donde dar a luz».

Sugerencias para la creación de nuevos Centros de Nacimientos

Por otro lado, estas matronas también han señalado algunas sugerencias para apoyar y facilitar el mantenimiento y creación de nuevos Centos de Nacimientos en España, bajo la idea de que la creación de este tipo de centros públicos en nuestro sistema sanitario «es enriquecedor para las mujeres, los recién nacidos y el mismo sistema».

Así, tras su experiencia en este primer centro público de España, consideran que para la creación y el mantenimiento de los mismos ayudaría:

– Crear una estrategia multidisciplinar para la humanización de los cuidados del Servicio de Maternidad del centro que incluya una evaluación periódica por parte de la dirección médica y de enfermería junto con los responsables de los estamentos qué participan en los mismos – obstetras, matronas, pediatria, anestesia y enfermería-.

– Elaborar un circuito de resolución de conflictos entre profesionales de sencilla comunicación y rápida resolución.

– Formar una comisión interna de evaluación de casos con resultados perinatales desfavorables, para el análisis e implementación de medidas preventivas si fuera necesario.

– Identificar la manera más eficiente para la supervisión del proyecto por parte de un organismo externo qué evalúe periódicamente los indicadores de calidad del Centro de Nacimientos.

«Por nuestra parte queremos dejar clara nuestra confianza en los Centros de Nacimientos como modelo de atención a la mujer y esperamos qué lo ocurrido en Martorell ayude a reflexionar, tanto para que pueda haber una futura reapertura como la creación de más Centros de Nacimientos en nuestro país. Esperamos también que los hechos ocurridos hagan evaluar y mejorar no sólo sobre la falta nacional de matronas y cómo podrían solucionarse, sino también las condiciones laborales a las que las matronas se enfrentan diariamente», concluyen.